Como sabes, existen dinámicas de comunicación interna muy recomendables para estrechar los lazos entre directivos y empleados, pero algunas veces nos falta tiempo para estudiar bien su funcionamiento y ponerlas en práctica en nuestra propia empresa. Por eso hemos buscado y seleccionado dos dinámicas de comunicación sencillas de implementar y muy útiles para reforzar el compromiso profesional de nuestro valioso equipo humano. ¿El objetivo final? Conseguir que nuestros empleados se sientan felices con su vida profesional para producir más y mejor.
La primera de las dinámicas de comunicación interna que hemos seleccionado busca un objetivo primordial: que conozcas más y mejor a cada una de las personas que forman parte de tu equipo humano.
Y es que el conocimiento personal es la base sobre la que se asienta una buena comunicación interna en el seno de la empresa por una razón muy simple: si no conoces personalmente a tu gente no puedes llegar a saber si se encuentran a gusto o a disgusto con su puesto, sus funciones, sus competencias, su jefe directo, sus compañeros…
Conocer a alguien abre las puertas al diálogo, a esa comunicación bidireccional que es absolutamente necesaria para crear un clima laboral positivo y productivo.
Dicho esto, veamos en qué consiste esta primera dinámica de comunicación interna que hemos dado en llamar “conociéndonos”.
Dividimos el grupo en un máximo de 8 personas y las colocamos en círculo. Cada persona debe decir su nombre y apellido y encontrar dos cualidades que le caractericen y que empiecen por las mismas letras iniciales. La primera persona se presenta y dice sus cualidades. La segunda persona hace lo mismo, pero además recuerda el nombre, el apellido y las cualidades de la persona que se acaba de presentar, la tercera persona hace lo mismo con su propia identidad y cualidades y, además, los nombres, apellidos y cualidades de las dos personas que se han presentado antes… Así sucesivamente hasta que el círculo de compañeros se haya presentado correctamente.
Por ejemplo:
Ana Pérez. Amistosa y perfeccionista.
Cristina Martínez. Carismática y “manitas”.
Felipe García. Festivo y gracioso.
Es importante que recordemos al grupo que cualquiera puede participar ayudando a los compañeros que no recuerden algún nombre o alguna cualidad. El clima debe ser competitivo, ameno y, sobre todo, divertido.
En cualquier grupo humano hay conflictos y puntos de vista enfrentados. Esto es así y no lo podemos cambiar, pero cuando los conflictos entran a formar parte de la vida cotidiana de una empresa y no se saben gestionar y resolver podemos llegar a tener un gran problema entre manos.
Así, es necesario que encontremos una buena dinámica de comunicación que nos ayude a resolver los conflictos profesionales en su fase más temprana, una dinámica grupal como la que te contamos a continuación.
Necesitamos reunirnos en un aula o similar con una pizarra para anotar. Una persona voluntaria hará de dinamizador del grupo, presentará el problema a resolver e irá anotando las conductas, frases o acciones que han provocado el conflicto. Cualquier participante puede aportar sus impresiones sobre el hecho detonante de la discusión, matizar algún comentario de otro compañero, etc.
Una vez hayamos desmenuzado el conflicto anotando las ideas centrales en la pizarra, pasaremos a anotar las posibles soluciones al conflicto intentando encontrar entre todos una solución justa, razonada y aceptada por el grupo.
Por ejemplo:
Alicia y José discuten porque los dos necesitan usar el coche de la empresa al mismo tiempo. El problema se produce día sí y día también, así que el líder del grupo lleva el conflicto a debate.
Alicia, José y el resto de los compañeros van comentando el problema mientras el dinamizador anota los distintos puntos de vista: prioridad de uso por antigüedad de Alicia en la empresa, necesidad de José de tener el coche siempre disponible para hacer su labor comercial, etc.
Una vez planteado el problema, se anotan posibles soluciones: intentar adquirir otro vehículo de empresa, repartir el uso del vehículo en horario de mañana para Alicia y de tarde para José, adquirir un Ticket Transporte para que uno de ellos lo utilice cuando el coche no esté disponible, etc.
Esta es una de las dinámicas de comunicación interna más eficaces que existen siempre y cuando exista un clima laboral positivo y no enrarecido durante años y años de resquemores y problemas no resueltos.
